Distrito Federal.- La Procuraduría General de la República (PGR) señaló que el enfoque de responsabilidad compartida para combatir al crimen y el tráfico de drogas no sólo debe ser entre países productores y consumidores de drogas, sino también entre los distintos niveles de gobierno de los estados.
En la presentación del Informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes por parte del presidente de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito, Antonio Mazzitelli, el subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales de la PGR, Alejandro Ramos, dijo que así es como se ha estado trabajando.
Abundó que se pretende estrechar la cooperación con las entidades y fortalecer no sólo las instituciones federales, sino también las de los estados y municipios, que son los que tienen la mayor fortaleza para enfrentar este flagelo a nivel más cercano de la población.
Interrogado en la cancillería, donde se efectuó el evento, sobre qué falta para enfrentar el problema del narco y en general del crimen organizado, expuso que el informe recomienda mejorar la cooperación internacional para la fiscalización de las drogas y de los precursores químicos.
Al respecto, resaltó que México ha prohibido la importación de algunas sustancias como la efedrina, pero hay otras de uso ilícito que tienen que ser fiscalizadas más seriamente para reducir el tráfico de precursores que alimentan los laboratorios que, a su vez, han sido detectados en un número creciente en el país.
Otros aspectos están relacionados con la atención y fortalecimiento de los centros de integración juvenil y otros centros que tienen que ver con la prevención.
Ramos Flores mencionó por su parte que en el informe se reconoce el esfuerzo que ha hecho el gobierno de México para enfrentar el problema del narcotráfico y de todo el crimen organizado.
Señala que el ataque frontal ha generado una migración hacia América Central, por lo que, derivado de lo mismo, viene el problema del enfrentamiento entre las organizaciones delictivas rivales y la utilización de la violencia como un mecanismo para tratar de enfrentar el embate del Estado con la intimidación y con el uso de la violencia.
El informe da cuenta también de que la disposición de armas en la zona es un factor que influye en un esquema de violencia.
Destacó que los tres ejes en los que se basa el gobierno federal para el ataque al narcotráfico son el de contención de las organizaciones criminales a través de las instituciones de aplicación de la ley.
Asimismo el fortalecimiento institucional para que todos los organismos que tienen que ver con el combate al fenómeno delictivo lo puedan hacer con eficacia y ello no implica sólo a las organizaciones de la ley sino la asistencial, social.
La tercera vertiente tiene que ver con la reconstrucción del tejido social, en cuanto a la necesidad de recomponer los valores y generar nuevos espacios de oportunidades para la población.
"La violencia no será permanente en la medida en que las instituciones se consoliden, se fortalezcan y que el tejido social se reconstituya con las políticas que tienen que ver con este problema".
Sobre el número de muertos en México a consecuencia de las drogas, Carlos Tena Tamayo, comisionado nacional contra las adicciones, indicó a su vez que no se tiene la información, porque el sistema de información actual no permite tenerla.
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