Distrito Federal.- En un hecho sin precedentes, el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) resolvió que a partir del próximo domingo, y por tiempo indefinido, los cuatros juzgados penales adscritos a las cárceles federales de Nayarit y Veracruz dejarán de aceptar nuevos casos, debido a que están totalmente saturados y la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) no ha asignado espacios para abrir nuevos tribunales.
Se trata de cuatro juzgados de importancia crucial para la Procuraduría General de la República (PGR), pues ante ellos se desahogan múltiples casos de delincuencia organizada, que se originan en otros estados del País, pero que son llevados a Nayarit y Veracruz porque los acusados son internados en los Centros Federales de Readaptación Social Noroeste y Oriente.
La medida obligará a la PGR a incrementar las consignaciones en Ceferesos como los de Matamoros, Estado de México y Jalisco, donde también hay juzgados penales o, en su defecto, a seguir internando a los reos en Veracruz y Nayarit, pero asignando los expedientes a jueces de otras entidades para que los procesos se lleven "por exhorto", lo que los hace más lentos y complicados.
En un acuerdo general publicado hoy, el CJF atribuyó el problema a la falta de espacios para nuevos juzgados, lo que es problema de la SSP federal, administradora de los Ceferesos.
"Los juzgados fueron aperturados en espacios reducidos proporcionados por la SSP federal, ubicados dentro de los Ceferesos No. 4 Noroeste y No. 5 Oriente, evitando con ello el traslado de reos fuera de las citadas instalaciones", explica el acuerdo.
"La gran capacidad con la que cuentan dichos centros para albergar reos, misma que en el caso del Cefereso Noroeste ha sido recientemente ampliada para alojar a casi mil 800 reos más, y en virtud del retraso en la dotación de espacios adecuados y suficientes para la instalación de nuevos órganos jurisdiccionales dentro de los referidos centros, ha derivado en una situación apremiante de altas cargas de trabajo en los juzgados de que se trata, la cual ha rebasado ampliamente su capacidad operativa, haciendo impostergable implementar acciones urgentes".
Entre noviembre de 2011 y marzo de 2012, los dos juzgados en Nayarit tuvieron un ingreso de 130 nuevos casos cada uno, el doble del promedio de los juzgados penales a nivel nacional, lo que provocó que tengan 580 asuntos pendientes de sentencia.
En la cárcel de Veracruz, en tanto, los dos juzgados recibieron en el mismo periodo 168 asuntos cada uno, y para marzo tenían 510 procesos pendientes de resolución, que se caracterizan por su alta complejidad al tratarse de casos de delincuencia organizada.
La Judicatura agregó que estos jueces también tienen que desahogar infinidad de exhortos que llegan de juzgados de todo el País, relacionados con los presos en ambas cárceles, que tan sólo en 2011 ascendieron a 13 mil 729, incluidos 626 careos, 635 tomas de declaración preparatoria y dictado de auto de término, y 10 mil 603 notificaciones.
"Todo lo anterior, aunado al gran aumento de consignaciones que se pronostica se presentará en el corto plazo derivado del incremento en el cupo en los reclusorios referidos, hacen patente la urgente necesidad de crear juzgados de procesos penales federales; no obstante la falta de espacios para tal fin, obliga a optar por la aplicación de una medida excepcional", señala el acuerdo.
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